Serenidad como compromiso

Hoy, el primer día del año, somos muy dados a asumir compromisos, algunos de los cuales jamás llegarán a cumplirse, es por ello que me comprometo firmemente ante vosotros a asumir un solo compromiso, aquel que un sin número de colectivos han hecho suyo: la oración de la serenidad, atribuida a múltiples autores.
Las comunidades de tratamiento de adicciones ya la hicieron suya en su momento y hoy la hago también mía, asumiendo que trabajaré cada día para que se cumpla en mi caso en las fechas que han de venir:
Concédeme serenidad para aceptar todo aquello que no puedo cambiar,
fortaleza para cambiar lo que soy capaz de cambiar
y sabiduría para entender la diferencia.
Como dicen los grandes maestros, en la sencillez están las respuestas, así que con esta simplicidad encaro un 2016 que sabré hacer de crecimiento.