Déjate ser

No hace falta que simules aquello que no eres, los que te quieren seguirán queriéndote, los que te aprecian como colega, compañero o amigo, seguirán haciéndolo, no hace falta que quieras ser quien no eres, no es necesario que te muestres indestructible e incluso un tanto soberbio.

Sí, las cosas han dado un vuelco, no lo esperabas y, sin embargo, han venido mal dadas, estate tranquilo, esto es una oportunidad para despojarte del personaje que venías arrastrando y poder mostrarte tal como eres, con tus luces y tus sombras.

Tu discurso te traiciona, se revela irreal y tramposo, poco creíble y, la verdad, me gustaría que pudieras confiar más en aquellos que te rodean y te mostraras tal cual te sientes en este momento, posiblemente vulnerable y débil, la debilidad de los fuertes.

Después de verte he sentido que había en ti mucho dolor y sufrimiento, sufrimiento no expresado y guardado entre las nieblas de un yo que hoy yace oculto tras una gran sombra de tu propio ego.

No hace falta que seas quien no eres, que muestres a quien nunca fuiste. Tengo ganas de ver al que eres, al que un día conocí, con quien reí y con quien lloré, con quien pasamos buenos y malos momentos, aquel a quien no le hacía falta fingir.

Hoy es oscuro mañana, ¿quién sabrá? ¿qué es bueno y qué es malo?, solo el tiempo podrá ponerlo en contexto, pero nada de eso llegará si antes no quitas el velo de tus ojos para poder ver lo que el hoy te depara.

Hoy es un buen momento para descargarte de esa mochila que nunca fue tuya, ¿a qué esperas para liberarte de ella?

Ahora te veo y te prefiero así, sin máscaras ni disfraces ¿te reconoces ahora?